La regulación está jugando un papel de transformación importante, pero hay otras razones que invitan a que las entidades financieras integren la sostenibilidad en sus políticas y procesos: los riesgos reales asociados a los factores ASG y especialmente al cambio climático
El crecimiento de la inversión sostenible orienta la financiación hacia las empresas con mejor desempeño socioambiental descartando aquellas que generan impactos negativos.
¿Qué papel juega la cultura corporativa en la transformación a la sostenibilidad? ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta? ¿Cómo promover una cultura corporativa orientada a la sostenibilidad?
Por la Gran Dimisión o Gran Renuncia se conoce a una tendencia laboral, social y económica en la que los trabajadores abandonan, renuncian o dimiten voluntariamente de sus puestos de trabajo, materializada por más de 4 millones de personas en Estados Unidos, sobre todo a partir de principios de 2021.
Estamos en un momento de transformación en el que la Unión Europea ha decidido jugar un papel relevante en el ámbito político y regulatorio, respecto a la promoción de la sostenibilidad, con efectos globales.
Nos encontramos inmersos en uno de los mayores desafíos de la historia reciente de la humanidad. Necesitamos sociedades y economías más sólidas y expuestas a menos riesgos. Necesitamos inversores con propósito.
Hacia la obligatoriedad de la debida diligencia en derechos humanos en la empresa: ¿cómo convertirla en oportunidad?
Para los que estáis interesados en contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) desde la empresa, os hacemos llegar una reflexión publicada por Fernando Varela de Ugarte (Social Gob), sobre el papel del sector privado y la Agenda 2030.
El sector público es consciente del importante rol que tiene para establecer reglas del juego, de manera que la economía produzca impactos más favorables para la sociedad. Frente a una tendencia realmente preocupante, de afección medioambiental, de exclusión, de desigualdad, de estrechamiento de las clases medias, observamos también una ventana de oportunidad.
Los participantes en la mesa del sector privado entienden que son un actor fundamental cuando se habla de una economía con mejores impactos medioambientales y sociales. Existe el consenso que se necesitan más empresas con enfoques e impactos más sostenibles e inclusivos. Así, se necesita más RSE, más economía social y más inversiones en estas empresas. Para que esto se dé se proponen diversas acciones.
La integración de la sostenibilidad es uno de los desafíos que el sector financiero español tiene por delante. Aunque frente a países del norte de Europa y EEUU vamos con cierto retraso, la tendencia parece imparable y ya hay unas cuantas entidades en España que están dando pasos importantes.
Estamos en un momento sensible. Pensamos que los logros y prosperidad alcanzados son invulnerables frente a retrocesos. Pero la historia nos muestra que no es así, por eso no podemos dejar que el miedo y el desencanto se extiendan.
La sociedad civil es el sector que está promoviendo con más fuerza los cambios. Desde la sociedad civil se reivindica fundamentalmente un cambio de orientación de la economía en la línea de volver a su sentido original.
Recientemente, en el Congreso de Empresa Familiar, Juan Roig, dueño y presidente de Mercadona, abogó por un modelo de gestión empresarial que equilibrara los beneficios con el resto de componentes de la cadena productiva, ya que el beneficio no puede ser la única misión de una compañía.
Hoy en día han aumentado las voces que claman por una economía que genere mejores efectos sociales y ambientales. Dado que la esencia y misión de SOCIAL GOB es la transición hacia una economía más sostenible e inclusiva, presentamos este documento que fue revisado en 2018 y que cuenta con propuestas desde las perspectivas del sector público, privado y sociedad civil.